Se escapan los sentidos mas simples de mi cerebro, sin intentar volver.
Quizás nunca quisieron escapar de la cárcel de mi delirio. Quizás nunca lo pudieron hacer, hasta que robaron la llave del rincón más cuerdo de mi espacio incomún.
Nunca quize que formaras parte de mi mundo, tu tenías el tuyo, yo el mio. Pero al final, te comiste de un bocado, mi corazón.
No quiero resumir palabras, no quiero redundar en lo mismo, no quiero desaparecer, no quiero aparecer, no quiero ser "popular", que es ser popular??, nunca lo entenderé. No sé si es ser vulgar, ser corto de dignidad, saber bailar, no saber hacerlo y disimular que lo haces, seguir una moda, pero que es la moda.
Demasiadas interrogantes, demasiadas preguntas sin sentido, simples preguntas, tan simples como escribirlas, como respirarlas, como sentirlas propias y a la vez impropias.
Nunca esperé un final, simplemente llegó en el momento en que menos lo esperaba (sí, sé que suena a frase sacada de novela mexicana, pero simplemente fue así), y me cogió tan desprevenido que no supe que hacer en ese momento.
Finales, algunos muy simples, otros más complicados.
Como dijo alguien muy cierto por ahí "no sé, si estoy despierto o tengo los ojos abiertos".
Saludos desde el lugar más intimo de mi cordura, seguiré tan cambiante como le he sido siempre, a veces es bueno, otras complicado, otras problemático, otras fatal, pero todo cambio tiene una enseñanza.
No me pidas cambiar, no lo haré.